En Kiddy Land seguimos las pautas que marca el ritmo de crecimiento de cada niño, esto solo puede lograrse manejando grupos reducidos de quince niños.

Nuestras educadoras se muestran altamente tolerantes en todo momento.

La disciplina en nuestro colegio se ejerce de manera positiva. Los niños en esta etapa de desarrollo tienen un alto nivel de energía, lo que ellos necesitan es aprender a canalizar sus energías hacia proyectos creativos. Si tratamos de contener esta energía con rigidez, tratando de sofocarla para controlar una conducta, corremos el riesgo de debilitar la imagen que los niños tienen de sí mismos.

Por eso les procuramos a nuestros pequeños actividades estimulantes en ambientes diseñados especialmente para los niños de esta edad.

A los pequeños no se les presiona para alcanzar el aprendizaje, nuestras maestras les presentan el conocimiento a través del juego, y ellos lo captan de manera natural, casi sin darse cuenta.

Nos esforzamos en todo momento para que los pequeños se sientan cómodos y felices, de esa manera ustedes, sus padres, podrán estar tranquilos realizando sus propias actividades.